La revista española Jotdown le realiza una entrevista en profundidad al presidente de la Fraternidad Comunión y Liberación. Se trata, como ellos mismos expresan de una conversación sobre todo: “Conversamos sobre política, razón y ciencia y nos explica las raíces del cambio que se está produciendo en la sociedad occidental con la Ilustración como elemento clave. También nos cuenta cómo se vive el cristianismo en Comunión y Liberación y de qué forma puede ser clave en nuestro futuro”.
“Julián es cercano, amable y claro y tiene un gran poder de convicción, incluso ante un ateo recalcitrante como quien lo entrevista”, afirma el entrevistador.
En la entrevista hay muchas frases, que son más bien perlas sobre el pensamiento de este teólogo. Algunos ejemplos:
Crisis de la sociedad occidental
“Quién iba a imaginar, solo hace algún decenio, que podríamos levantar muros en Europa después de haber deseado durante tantos años abatir el Muro de Berlín”
“Los valores nos permiten abrazar la diversidad del otro, nos facilitan relacionarnos con los que son diferentes, nos permiten salir de nuestros esquemas predefinidos, en definitiva: hacen la vida más humana, menos dura”.
“Estamos al final de un mundo que nació con la Ilustración”.
“Lo que se está derrumbando ante nuestros ojos es lo que ha sostenido nuestra convivencia en los últimos siglos, en medio de todos los desafíos”.
“Estamos asistiendo a su derrumbamiento. El reto ante el que estamos todos es encontrar las nuevas bases para la convivencia.
Sobre el terrorismo en Europa
“Muchos de los jóvenes que cometieron los atentados en el país vecino habían nacido en Francia —eran franceses de segunda o tercera generación—, habían recibido la educación francesa como ciudadanos de la república”.
“Del mismo vacío de los unos y de los otros (Cristianismo e Islam) puede nacer la fascinación por el terrorismo. O las personas encuentran algo por lo que vale la pena vivir o, si no lo encuentran, pueden abandonarse al extremismo”.
Ciencia y Fe; Iglesia y contemporáneos
“El arte y la ciencia tienen un inmenso valor. El problema es cuando la vida urge con todas sus exigencias fundamentales de sentido. Ahí es donde cada uno tiene que ver si la ciencia y el arte tienen la capacidad de responder a esas urgencias, de iluminar una circunstancia dolorosa, de darle la energía para poderla vivir y no acabar desesperado”.
“La fe y el arte no solo no son incompatibles, sino que el gusto por la belleza es propio del hombre de fe, del hombre consciente de sí”
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